39. AMON AMARTH - Once Sent From the Golden Hall
1998
Suecia
Black Metal, Death Metal
*****
Cuando escuché este álbum por primera vez quedé muy impresionado. Simplemente no podía creer lo que mis oídos escuchaban, y de un momento a otro este disco llegó a ser un ítem habitual en mi equipo estéreo, y por un periodo de tiempo importante.
De potente y desgarrador sonido, su interesante propuesta de brutalísimo death metal matizado magistralmente con texturas de black metal y algo de folklore nórdico y música celta (esto último se nota, no en la instrumentación, sino que en las melodías), logró fácilmente convercerme de que la banda se las traía. Once Sent... tenía esa mágica fórmula para despertar una ferviente devoción, entregando en sus ocho temas, verdaderos himnos metaleros de gran poder y absoluta convicción. Sin duda que se trataba de una pieza importante, y no un disco más de un bullicioso grupo sueco. Amon Amarth, quienes originalmente solían llamarse Scum, se formaron en 1988, adoptando su nombre actual, cuatro años más tarde. Luego de dos demos, Thor Arise y Arrival of the Fimbul Winter, lanzan su primer EP, Sorrow Throughout the Nine World en 1996 bajo el sello Pulverized, de Singapur. Recién en 1998 aparece su primer álbum larga duración, que es precisamente el disco que ahora estamos revisando.
Once Sent... es un álbum lleno de música poderosa, melódica, de gran peso, con hartos matices y buenas ideas por doquier. Cuesta encontrarle puntos flacos. Música directo al hueso que en su incesante machaque sónico avasalla con todo a su paso. Aun así, no se trata de música excesivamente veloz, sino que término medio, dando mucha importancia a la melodía y a la estructura de las canciones, haciendo de cada una de ellas un poderoso y beligerante himno de guerra.
Destacan todos los temas sin excepción, en especial Without Fear, Victorious March, Friends of the Sun Cross, Abandoned y finalmente, el tema que lleva el nombre del disco.
No me queda más que decir que esta es una excelente placa, absolutamente recomendable para todo aquel que aprecie música de verdadero poder y garra.
1998
Suecia
Black Metal, Death Metal
*****
Cuando escuché este álbum por primera vez quedé muy impresionado. Simplemente no podía creer lo que mis oídos escuchaban, y de un momento a otro este disco llegó a ser un ítem habitual en mi equipo estéreo, y por un periodo de tiempo importante.
De potente y desgarrador sonido, su interesante propuesta de brutalísimo death metal matizado magistralmente con texturas de black metal y algo de folklore nórdico y música celta (esto último se nota, no en la instrumentación, sino que en las melodías), logró fácilmente convercerme de que la banda se las traía. Once Sent... tenía esa mágica fórmula para despertar una ferviente devoción, entregando en sus ocho temas, verdaderos himnos metaleros de gran poder y absoluta convicción. Sin duda que se trataba de una pieza importante, y no un disco más de un bullicioso grupo sueco. Amon Amarth, quienes originalmente solían llamarse Scum, se formaron en 1988, adoptando su nombre actual, cuatro años más tarde. Luego de dos demos, Thor Arise y Arrival of the Fimbul Winter, lanzan su primer EP, Sorrow Throughout the Nine World en 1996 bajo el sello Pulverized, de Singapur. Recién en 1998 aparece su primer álbum larga duración, que es precisamente el disco que ahora estamos revisando.
Once Sent... es un álbum lleno de música poderosa, melódica, de gran peso, con hartos matices y buenas ideas por doquier. Cuesta encontrarle puntos flacos. Música directo al hueso que en su incesante machaque sónico avasalla con todo a su paso. Aun así, no se trata de música excesivamente veloz, sino que término medio, dando mucha importancia a la melodía y a la estructura de las canciones, haciendo de cada una de ellas un poderoso y beligerante himno de guerra.
Destacan todos los temas sin excepción, en especial Without Fear, Victorious March, Friends of the Sun Cross, Abandoned y finalmente, el tema que lleva el nombre del disco.
No me queda más que decir que esta es una excelente placa, absolutamente recomendable para todo aquel que aprecie música de verdadero poder y garra.