385.
1997
Alemania
Heavy Metal, Power Metal
****
Quinto álbum de estudio. Viene con buenas canciones, poder, fuerza, excelentes solos y riffs, y toda la vibra de los Helloween antiguos que el propio Kai Hansen creó al fundar esa banda con Michael Weikath. El punto en contra es la difícil separación de las dos bandas en cuanto a sonido. Quizás la única gran diferencia sea que Gamma Ray hace más uso de teclados que lo que alguna vez usó Helloween. Pero a grandes rasgos se trata casi de lo mismo. Ahora bien, este disco sigue siendo una excelente placa de poderoso power metal optimista. Musicalmente virtuoso y retador, destaca en todos los planos excepto en la voz. Canta Hansen, al igual que como lo hizo en el disco anterior y la verdad es que aunque no canta mal, el resultado pudo haber sido mejor. Hansen no se compara con el vocalista anterior, Ralf Scheepers, quién formaría Primal Fear luego de haber fracasado en su intento de unirse a Judas Priest cuando buscaban reemplazo para Rob Halford. Por supuesto que Hansen a esta altura estaba cantando mucho mejor que cuando lo hizo en el primer disco de Helloween (Walls of Jericho).
